21/5/13

Invierno del 2013: Porque el dulce siempre lleva blancos

La verdad es que cuando decidí que empezaba la temporada de invierno de este 2013 no tenía demasiadas cosas claras. Lo único que tenía diáfano es que este invierno estaría marcado por la ausencia de competición. Me apetecía hacer deporte por y para mí, entrenar simplemente para estar bien, para disfrutar de la montaña, para sentir que la presión se quedaba en el valle y que todo lo que estaba haciendo lo hacía porque me apetecía hacerlo.
Y empezó a nevar… Nieve, más nieve, mucha más nieve…. La montaña estaba increíble. Y, claro está, las focas empezaron a deslizarse sobre el blanco.
Primero sesiones de intensidad, donde primaba el desnivel, me apetecía acostumbrar a la musculatura. Había que pasar del TrailRunning al esquí tanto en disciplina de subida como en disciplina de bajada. No os negaré que las dos primeras sesiones de más de 6 horas de desnivel tuvieron consecuencias dolorosas pero luego fue algo increíble. El cuerpo se adaptó a la perfección, poco a poco el corazón entendía los cambios de ritmo y las marchas más o menos intensas (que debo decir que son muy parecidas a las del Trail) y todo mi cuerpo respondía al esfuerzo.
Llegó navidad y había que subir al Refugio. Grandísima opción. Subir muy cargado pendientes intensas, poder salir foqueando desde la puerta de casa, estar feliz, relajado, vivir en la montaña, todo ello hacía que me sintiese “un animalito” más de ahí arriba.
Y los logros fueron llegando… Entrenos que duraban unas 10 horas, sesiones de volumen que no bajaban de los 1200 metros de Desnivel, excursiones al amanecer, subida a los picos más encantadores del Pirineo… Todo era algo mágico.
La verdad, es que a modo de conclusión, la temporada ha sido increíble, he descubierto cosas, hechos, personas, elementos, sensaciones, emociones, experiencias… que desconocía por completo; y eso amigos míos no tiene precio.
Ahora toca calzarse las zapatillas, seguir corriendo kilómetros y kilómetros por las montañas, acumular desnivel…. ¿Pero qué digo? Lo que toca es seguir disfrutando de la montaña, seguir creciendo allí arriba, seguir sintiendo la libertad… Seguir siendo yo.
Volveremos a alguna competición de TrailRunning pero sólo por el mero hecho de pasarlo bien, de estar con amigos en carrera, de volver a cumplir retos y tener metas que conseguir… Porque de ilusiones se vive!!!
Ser felices familia!
Aker

No hay comentarios: